HISTORIA
Fuente:es.wikipedia.org/wiki/Radioterapia#/media/File:1930_radioterapia_istituto_tumori_milano.jpg
Antes de finalizar el siglo XIX se encuentran tres hitos históricos relacionados con la puesta en marcha de las radiaciones ionizantes para el tratamiento de los tumores malignos. El primero de ellos se da en 1895 con el físico alemán Wilhelm Röntgen (1845-1923) al descubrir los rayos X en Würzburg. Un año después Henry Becquerel (1852-1908) hizo lo propio con la radiactividad natural y en 1898 Marie Curie (1867-1934) descubrió el radio. En los años subsiguientes a estos hechos, unas once décadas posteriores, la radioterapia dependía de radiaciones de baja energía con capacidades limitadas de penetración, no existían ninguna clase de conceptos dosimétricos mínimos, seguros ni procedimientos fiables para delimitar la localización tumoral y los conocimientos que sustentaban el plan de tratamiento o las deducciones pronosticas fueron realmente inciertas y frágiles.
En las primeras décadas del siglo XX, los hallazgos que progresivamente fueron ampliando el conjunto de los conocimientos científicos alrededor del empleo terapéutico de las radiaciones ionizantes se sucedieron al azar, entrando a partir de los años 50 y hasta finales de los 80 en un lento desarrollo. Sin embargo, entrados los años noventa la preocupación por la necesidad de encontrar soluciones a las dificultades inherentes en el deposito de la radiación, preservando al mismo tiempo los tejidos adyacentes, aceleraron los procesos de investigación con la misma velocidad que se detectaban necesidades no cubiertas y amenazas potenciales.